YOGA FACIAL

Yoga facial
Una de las partes más sensibles de nuestro cuerpo es el rostro. La cara es el mapa de nuestra vida, en ella se van grabando las emociones, tanto positivas como negativas.
En algunas de estas partes se concentran muchas de nuestras tensiones habituales: estrés, miedo, enfado…
A través de los ejercicios se tonifica, estira y relaja la musculatura facial, mientras se respira de forma consciente y relajada. Los ejercicios se combinan con técnicas de automasaje y digitopuntura para aumentar su eficacia.
Como resultado obtendremos un mejor tono muscular, mejor irrigación sanguínea, y unos rasgos más serenos y relajados. Al fortalecer los músculos atenuamos los pliegues y las arrugas y al mejorar el riego nutrimos y oxigenamos los tejidos desde las capas más profundas, con lo que mejora de forma visible la calidad y el tono de la piel.